El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, en un discurso desde la Casa Blanca, anunció nuevas sanciones económicas y restricciones de exportación a Rusia en respuesta a su invasión de Ucrania, mismas a las que calificó de severas.
“Esto impondrá un costo alto a la economía rusa, tanto de inmediato como a largo plazo”.
Señaló además que Putin rechazó los intentos de Occidente de entablar un diálogo y violó el derecho internacional. “Putin es el agresor. Putin eligió esta guerra. Y ahora él y su país asumirán las consecuencias”.
Según el mandatario, estas nuevas sanciones limitarían la capacidad de Rusia para hacer negocios en dólares, euros, libras y yenes.
También adelantó que la OTAN se reuniría el viernes para trazar nuevas medidas. Reiteró que Estados Unidos no entraría en guerra con Rusia, pero que cumpliría con sus compromisos del Artículo 5 para defender a los socios de la OTAN.
Biden dijo que este era un momento peligroso para toda Europa y que había autorizado a las tropas que habían sido puestas en espera para desplegarse en Alemania.
En un comunicado, las siete potencias industriales dijeron estar “preparadas para actuar” para minimizar las consecuencias en los mercados energéticos mundiales del ataque de Moscú a Ucrania y reiteraron las sanciones a un importante oleoducto de Rusia, país rico en energía.
El presidente estadounidense señaló que Zelenski le había pedido que “haga un llamado a los líderes del mundo para que se pronuncien claramente” contra la “flagrante agresión” de Putin.