Por Zulema Alanes B.-
A título de reactivar la economía, el plan del Gobierno es destinar 600 millones de dólares para refinanciar millonarias deudas del agronegocio a través del Plan de Rehabilitación del Sector Agropecuario y del Programa de Reactivación del Empleo, aseguró el director de Fundación Tierra, Gonzalo Colque.
Ese monto, dijo, representa más de la mitad de los fondos públicos que, el pasado 18 de junio, anunció el Gobierno de Jeanine Añez destinará para encarar la crisis económica post pandemia del coronavirus.
Colque explicó que el plan gubernamental se ajusta a las demandas de la Confederación Agropecuaria Nacional (Confeagro), que “desde hace tiempo ha solicitado fondos de emergencia para refinanciar las deudas del agro cruceño con la banca y las casas comerciales que fungen como financiadoras, pero están al margen del sistema financiero regulado”.
El director de Fundación Tierra aseguró que con recursos fiscales, el sector agroexportador pretende refinanciar sus deudas en condiciones favorables, a una tasa de interés del 4% , 12 años plazo y dos años de gracia, eximidos del pago de capital e intereses. Insistió que “los recursos que el Gobierno pretende orientar hacia este sector, no están destinados a reactivar la economía ni cuidar los empleos existentes, sino simplemente a refinanciar antiguas deudas en condiciones muy favorables, básicamente para reducir las obligaciones financieras que el sector ha adquirido en años anteriores”.
Detalló que los 600 millones de dólares servirán “básicamente para rescatar a los grandes empresarios endeudados y ahorrarles millones de dólares” y, por tanto, está claro que “el Gobierno intenta beneficiar a un pequeño grupo del agropoder con cientos de millones de dólares para que paguen sus deudas contraídas en años anteriores”. La medida, dijo “no tiene nada que ver con la pandemia ni con la situación de emergencia sanitaria que vive el país”.
Según Colque el Gobierno pretende justificar el destino de esos recursos con el argumento de que el sector agroexportador es uno de los más afectados por la pandemia, “cuando en realidad es uno de los sectores que no ha parado actividades, ha estado trabajando, la cosecha ha sido regular entre marzo, abril y mayo, se prepara para la próxima siembra, a diferencia de otros sectores económicos, no ha parado durante la cuarentena”.
Alertó que el fondo de 600 millones de dólares forma parte de un paquete medidas aprobadas a pedido de Confeagro que “pretende que la función económica social de la tierra se suspenda a 12 años, ya suspendieron con Evo Morales a 5 años, dejar a medianos y grandes propietarios de la tierra sin control ni regulación estatal, dejar de controlar los desmontes y la deforestación, suspender por seis meses el pago de los aportes a las AFP, anular el pago de impuestos por hectárea de tierra, entre otras medidas”.
En opinión de Colque, “en el contexto actual de emergencia se están aprobando decretos y procedimientos abreviados y se están destinando recursos públicos a nombre de reactivación de la economía, sin control social y de una manera no transparente”.
Dijo que, en tiempos de emergencia y recursos escasos, “quieren aprovechar de la pandemia para empoderar aún más a quienes tienen privilegios económicos”.
Colque dijo que las medidas del Gobierno “no van a beneficiar a los pequeños productores que también están endeudados con proveedores de semillas y acopiadores de granos, serán unos pocos los que acaparen, el financiamiento de emergencia es importante para reactivar la economía, pero hay que evitar su acaparamiento por parte de los grupos de poder”.
Según el director de Fundación Tierra, el fondo de 600 millones de dólares no va a fomentar la producción del pequeño productor, ni siquiera la producción de alimentos, en general, sino al sector agroexportador.
Por tanto, dijo, no tiene relación con la seguridad alimentaria, “excepto el hecho de que la soya es alimento para pollos”.
Añadió que las medidas del Gobierno son tramposas porque “orienta dos o tres millones de dólares para pequeños productores campesinos, pero para los grandes empresarios se destinan cientos de millones de dólares”, por lo que planteó que es necesario “aclarar estas distorsiones, hay que supervisar, transparentar y abrir un debate público asumiendo que, en general, la actitud de quienes tienen poder económico y poder político es aprovecharse de la emergencia”.
Colque insistió que “se está aprovechando la pandemia para canalizar recursos públicos y beneficiar a sectores minoritarios pero poderosos, a título de reactivar la economía” y explicó que “para encarar el impacto de la pandemia el fondo de financiamiento no debería pasar de 200 millones de dólares”.
A continuación, la entrevista completa con Gonzalo Colque.