Por: Amalia Pando |
La historia de las tierras de la familia Marinkovic contada por GONZALO COLQUE
Había una vez un hombre muy rico que poesía una laguna en forma de corazón y vastas extensiones de tierras que se perdían en el horizonte. Pero un día el rey dijo ser poco afecto a los ricos y le arrancó el corazón y todo lo demás. El hombre que había quedado menos rico, alegó y peleó en los tribunales del rey sin que pudiera recuperar lo que aseguraba le pertenecía. Hasta que un inesperado día, el rey fue destronado y como si fuera un milagro este hombre rico se convirtió en ministro de Estado y tuvo el poder para recuperar lo que había perdido. Pero su felicidad duró poco. Perdió su cargo de ministro de Estado y con ello nuevamente sus tierras. Se aferró a los papeles y expedientes, y aunque los vientos políticos soplaban en su contra, encontró entre quienes imparten justicia e injusticia a un par de buenos y codiciosos amigos, y, así, con estos favores volvió a mirar el horizonte y todo aquello, todo, era suyo.
En otro extremo del reino, otros vasallos de aquel rey poco afecto a los ricos vieron que su majestad había adquirido el vicio de recibir diezmos y ellos también quisieron ser ricos, así que se lanzaron a una cruenta batalla desalojando a su paso a todo aquel que se le pusiera al frente y gracias a otros buenos y codiciosos amigos conquistaron tierras 10 veces más extensas que las del hombre rico.
Este no es un cuento, son hechos de la vida real, hechos que conoce bastante bien el investigador de la “Fundación Tierra” Gonzalo Colque. Es la historia de las tierras de la familia de Branco Marinxovic, empresario de Santa Cruz y exministro de Economía del gobierno de Jeanine Añez. En los años 90s los Marinkovic recibieron del Consejo Nacional de Reforma Agraria dos regalos que sumados hacen las 33.000 hectáreas que durante 2 décadas estuvieron en conflicto. Ese Consejo fue clausurado por corrupción desmedida y en su reemplazo nació el INRA que también va por ese camino.
Colque hace cuentas y nos dice que ya son 23 años de litigio. El pecado original de esta historia lo cometió un mecánico y fue Branco el que le dio un buen mordisco, no a la manzana bíblica sino a la Laguna Corazón.
EL CUENTO DEL MECÁNICO
La propiedad “Laguna Corazón” está en Guarayos y es de 12.000 hectáreas de extensión, y, la otra está en la Chiquitanía, es de 21.900 hectáreas, en total son más de 33. 000 hectáreas.
Hace 23 años esas 33.000 ha, que son 330 Km2 , era una extensión más grande que la que ocupaba la capital de Santa Cruz, ciudad que se ha expandido en estas últimas décadas y ocupa actualmente 567 Km2.
GC: Los papales de estos dos predios tienen como origen el Consejo Nacional de Reforma Agraria que fue disuelto por regalar miles de hectáreas a gente muy poderosa de Santa Cruz.
Hay una sentencia de 1992, firmada por un juez de apellido Toledo. Y en el proceso de saneamiento se ha evidenciado que este señor Toledo, primero, no era juez agrario en esa época, y segundo, no era un jurista, no era un abogado, como exige la ley desde 1953. El INRA incluso tiene documentación del año 97, donde consta que este falso juez tenía como profesión la de mecánico.
Esta es la principal razón, lo dice el informe técnico del INRA, por la que se aplica una figura que se llama nulidad absoluta. Aquí hay un problema grande. Y por lo tanto, nulidad absoluta significa que no hay un origen lícito de esa propiedad. Y la ley dice que cuando no hay origen lícito, no se puede dar derecho propietario.
A pesar del pecado orinal cometido por el mecánico, la familia Marinkovic tomó posesión de esas tierras y no las soltaron. Estando en posesión son propietarios, eso creyeron.
LAS VACAS IMPORTAN
GC: Hay gente que ha reclamado posesión sobre 100.000 hectáreas sin tener una vaca. Entonces, por más que sea declarado poseedor, no puede ser propietario. Las vacas importan porque le dan función social.
Y en el caso de las Tierras Bajas del Norte de la familia Marínkovic, el INRA no actuó en un extremo radicalizado. El año 2015, les llegó a reconocer 5.000 hectáreas, sobre las 20.000 en litigio, justamente por este derecho que tú mencionas, que estaban en posesión.
Y ese fue un fallo y el título agrario estaba listo para entregarse en esas condiciones. Lo que pasó es que la familia Marín Covic no aceptó y decidió procesar al INRA ante el Tribunal Agroambiental para que le reconozca las 21.000 hectáreas. Y obviamente el INRA se defiende y dice que no le corresponde porque para ello necesita tener este origen lícito y no lo tiene. Pero, además está la extensión. 5.000 hectáreas, Amalia, según la nueva constitución, es el máximo permitido en el país como propiedad agraria.
En el año 2020, cuando Branco Marinkovic asumió el ministerio de Economía, el INRA cambió de personal que a la velocidad de un rayo emitió un informe para favorecer al ministro. Usando ese nuevo informe, en diciembre del año pasado, 2023, el Tribunal Constitucional ordenó al INRA el saneamiento a favor de la familia Marinkovic de uno de los predios, el más grande, de 21.533 ha.
LO QUE PASÓ, PASÓ
En 1992, en el Gobierno de Jaime Paz Zamora, el entonces diputado Miguel Urioste, denunció a Hedim Céspedes Cossio y a su empresa BOLIBRA. Céspedes fue ministro de Educación y diputado de ADN, y gracias a esta posición privilegiada recibió gratuitamente del Consejo de Reforma Agraria dos predios en Santa Cruz que sumados hacían 100.000 ha. La denuncia obligó al gobierno a cerrar el Consejo y cuatro años después se inauguró el INRA. Sin embargo, el delito no fue sancionado. Un anunciado Juicio de Responsabilidades se diluyó en el Parlamento y en 2004, 15 causas de corrupción prescribieron, entre ellos la de BOLIBRAS.
GC: Los dos magistrados del Tribunal Constitucional que firman la sentencia a favor de Marinkovic , Hurtado y Espada , no sabían o no tomaron en cuenta que la resolución del INRA del año 2020, en la que basan su argumentación, fue aprobada cuando el señor Branco Marinkovic era ministro de Estado. Primero fue nombrado como ministro de Planificación, ejerció ese cargo y luego pasó a ser ministro de Economía en 2020. Fue cuando cambió el personal jerárquico del INRA y obtuvo una resolución a su favor. Ese es el contexto, usó su influencia, su poder y el INRA en solo dos semanas decidió borrar todo el trabajo técnico y jurídico de 20 años y reemplazarlo con un nuevo informe que recomendaba la titulación de estas propiedades.
Ya existió un antecedente similar, recordaras el caso de Hedim Céspedes, del famoso caso BOLIBRAS. Con ese antecedente no se puede entregar tierras a alguien que ejerce un cargo tan alto como ministro de Estado. Entonces aquí prácticamente el Tribunal Constitucional estaría legalizando un delito. Creo que el TCP ha cometido muchísimos errores. En ellos ha primado pues otro tipo de intereses. ¿Cómo en tan corto tiempo han resuelto y tomado decisiones sobre una materia tan complicada de entender? Además, por encima del tribunal especializado y que tiene autoridad que es el Tribunal Agroambiental, ¿no?
UN PENETRANTE OLOR A PODRIDO
El viceministro de Tierras y ex Fiscal General, Ramiro Guerrero, dijo que estaban pensando abrir un juicio contra los tribunos Gonzalo Hurtado e Iván Espada. Sin embargo, de tanto pensar debió quedarse dormido. Ambos tribunos son parte de los auto prorrogados y del esquema de poder del “arcismo”.
GC: El TCP ha tomado una decisión que no le correspondía. Solo puede resolver asuntos constitucionales, por ejemplo si a la familia Marinkovic se le hubieran recortado el derecho a la defensa que es constitucionales y, en ese caso podía ordenar al Tribunal Agroambiental que vuelva a revisar el trabajo que ha hecho, porque a lo mucho podía llegar a eso, pero se han sobrepasado, no solamente recomiendan que vuelvan a revisar los documentos anteriores, sino que ordena a las autoridades competentes cuál debe ser su decisión sobre el derecho propietario, ordena entregar un título agrario sobre estas dos propiedades sin quitarles ni un solo m².
Al mismo tiempo se olvidaron de la Constitución que dice que el máximo de tierras en manos privadas es de 5.000 ha. Y este TCP ha ordenado entregar 33.000 ha.
Huele a “maletinazo”, a podrido. ¿Tu que crees que hubo coima?
GC: yo no tengo pruebas, pero tampoco dudas de que ha pasado eso. Tenemos muchos amigos, colegas, abogados, gente que ha trabajado en el INRA, , que ha trabajado en el Tribunal Agroambiental , y entre broma y broma, apuestan si habrán sido 100.000 dólares o habrán sido más. Obviamente es a la hora de hacernos esta pregunta porque este fallo es irracional. No hay otra explicación.
MAL DE MUCHOS, CONSUELO DE TONTOS
Gonzalo Colque estima que hay más de un centenar de personas que en Santa Cruz poseen predios de más de 5.000 ha. A esto se suman muchos otros que dividen de modo ficticio entre sus familiares enormes cantidades y cuando la familia ya no alcanza ponen a nombre de terceros.
GC: Es importante no meter en la misma bolsa a los empresarios agropecuarios. Hace 20 años todos podían ser calificados de latifundistas pero la historia se ha encargado de borrar ese estigma. Hoy en día existen empresarios agropecuarios que cumplen perfectamente la ley, que cumplen perfectamente la función económica, social y hacen un trabajo productivo. Quizás tienen fallas, todavía tienen grandes deudas en cuanto a la conservación, en cuanto a la biodiversidad, y por no reforestar tanto como se desmonta. Pero, definitivamente hay gente que genera empleo, genera movimiento económico, trabaja la tierra, y, particularmente yo diría, es más valiosa aquella gente que trabaja personalmente la tierra siendo empresario. Cuando uno tiene 2. 000 hectáreas, 5. 000 hectáreas de soya o de maíz, están en el campo bajo el sol, trabajando con la piel tostada por el sol, esa gente es gente respetable en el país . Pero hay gente que tiene mucho más tierras que esta, y lo peor, hay gente que teniendo tierra vive del alquiler de la tierra y no trabaja. Así que y hay gente que simplemente utiliza la tierra para el engorde. Entonces hay un sector, el sector mayoritario diría yo, que hace un mal uso de los recursos naturales, depreda estas tierras.
Y están los nuevos ricos, los que ocupan tierras apuntando sus fusil, matan, secuestran, amedrentan, avasallan, despojan, devastan, deforestan y se apropian de otras miles de ha. Los interculturales o traficantes de tierras. Y de ellos, ¿Qué dices?
GC: Amalia, primero te comento que hay gente, empresas también, que sabiendo que una zona no es apta en términos agrícolas, igual desmontan en extensiones de 1.000 , 2.000 y 3.000 hectáreas. Por ejemplo, en San Ignacio de Velasco, en Concepción, a sabiendas de que la agricultura solamente va a rendir durante tres o cuatro años y después técnicamente está demostrado que ahí no hay producción, a pesar de eso eliminan el bosque. Y ese tipo de excesos es lo que hay que controlar. Hoy, en día hay un debate en Santa Cruz, por ejemplo, de por qué este año vamos a tener menores cosechas. Y la razón es muy simple, el exceso, el tamaño de la deforestación acumulada que tiene Santa Cruz es tan grande que está cambiando el clima, el ciclo de lluvias, el patrón climático que regula humedad y que regula la agricultura en el oriente. Y ahí también hay gente que está tomando conciencia y está empezando a preocuparse, por ejemplo, de recuperar las cortinas rompevientos y todos estos elementos ambientales que son importantes para la producción sostenible.
Del año 2017 al 2022 se han registrado al menos 1.384 avasallamientos, sin contar los años 2018 al 2020, por falta de datos. En 2017, se presentaron 580 denuncias; en 2021, otras 367 ; y, en 2022, están registradas 237 denuncias. En todos los casos hubo violencia. Los hechos más graves se produjeron en “Las Londras” con el secuestro por varias horas y tortura de los dueños del predio, policías y seis periodistas. En 2023, la reserva natural de San Carlos fue ocupada y 400 ha fueron desmontadas. Se afectó la reproducción de las cigüeñas. En el Parque Amboró, un análisis satelital mostró el avance de la deforestación, de 14 ha en 2019 a 107 ha en 2023. En diciembre, avasalladores de San Julián pretendieron desplazar a otro grupo parecido de Las Pailitas. Los enfrentamientos dejaron un muertos y varios heridos.
El director del INRA Eulogio Nuñez dijo tener pendientes de resolución a 208 caos de avasallamiento.
GC: Amalia, son grupos que adoptan, seamos claros, adoptan el disfraz de campesinos andinos, de interculturales, de gente que no tiene tierra y empieza a organizarse en grupos que se hacen llamar comunidades y toman tierras, en la mayoría de los casos en complicidad y coordinación con las autoridades del poder ejecutivo. Quieren asentarse y ocupar a la fuerza estas tierras, como sabemos, no son tierras donde llegan a sentarse a vivir, a trabajar. Por lo menos en Santa Cruz, Amalia, hay 1400 comunidades con autorizaciones, cinco de asentamientos, 60 en y tierras fiscales. No tengo el dato exacto, pero fácilmente podría decirte que un 80 % de las comunidades son comunidades fantasmas, donde la gente no vive y solamente acapara de esa manera con el fin de revender estas tierras, de transferir a otros con n papeles que supuestamente les reconocen derechos de autorización y de desmontes. Entonces, es un sector, y de nuevo, tampoco todo el mundo tiene estas características, y a veces sufren y son víctimas personas que realmente apuestan a trabajar tierras en zonas muy alejadas. Y, conocemos de igual manera, comunidades campesinas de gente, por ejemplo, que se ha ido de Chuquisaca, de las zonas más pobres de Chuquisaca, y que hoy en día en San Ignacio de Velasco siembran maní, y a pesar de que no encuentran mercado y precio para su producción, hemos preguntado, si la están pasando tan mal, ¿ por qué no se vuelven a Chuquisaca? Y dicen que a pesar de esas condiciones, aquí tenemos mejor vida y podemos comer. Entonces, muchas veces esta gente también es víctima, porque a veces pensamos que todos son avasalladores, pero hay gente que vive en el lugar, hay gente que abre camino utilizando su propio dinero, su propia fuerza de trabajo, y hay gente que incluso establece zonas de asentamiento con sus propias escuelas. Es la minoría, pero existe, y por lo tanto no habría que ponerlos en la misma bolsa. Pero la gran mayoría son avasalladores, y yo diría, traficantes de tierra.
CALLEJÓN SIN SALIDA
¿La extensión de hectáreas avasalladas en Santa Cruz, se aproxima a la cantidad obtenida por la familia Marinkovic?
GC: Supera, obviamente, porque estamos hablando de probablemente 300.000 hectáreas ocupadas. Santa Cruz es el departamento que tiene grandes extensiones de tierra todavía sin ocupación, sin producción, sin asentamiento. Y allí hay un montón de gente de todo tipo y extracción social que empieza a pelear violentamente por estas tierras. El año pasado, en Guarayos hubo enfrentamientos, han quemado galpones, han quemado maquinaria agrícola, ha habido gente que ha muerto a bala en esas zonas y han habido enfrentamientos con graves consecuencias. Ahí hay un error del gobierno nacional en gran parte. El gobierno nacional ha entregado autorizaciones a nuevas comunidades, a gente que en realidad es militante del MAS, y es como un pago al apoyo político, y eso nunca debió haberse hecho. Y eso está exacerbando todos estos problemas que hoy en día estamos presenciando.
¿Ves alguna salida, un fin que proteja bosques, pueblos originarios y una producción sostenible?
GC: Yo creo que se está tocando fondo, Amalia, está tocando fondo. Y cuando se toca fondo lo único que quedaría es empezar a reactivar un proceso de distribución mucho más sostenible, de anulación de muchísimas autorizaciones, ¿no? Donde no está tocando fondo es en el desmonte. Sigue el desmonte, una cosa es hablar de cómo la gente se pelea y se apropia de estas tierras, pero gran parte de estas tierras todavía tienen bosque y las autorizaciones, los desmontes ilegales están avanzando sobre estas tierras en disputa. Si tuviéramos que poner en la balanza ambos temas, yo diría que para frenar este tráfico de tierras, hay que frenar el desmonte ilegal y las autorizaciones irracionales de desmontes que hace la Autoridad de Bosques y Tierra. Eso creo que ralentizaría y en algún grado disminuiría el problema del conflicto por las tierras que tenemos en el país . Entonces, por el lado ambiental, creo que todavía se puede hacer mucho y estamos a tiempo en muchas zonas. Si no se da tanta autorización de desmonte, podríamos salvar miles de hectáreas de estos desmontes irracionales donde van a sembrar soya o maíz por dos o tres años y sin embargo dejan toda esa zona sin bosques por los próximos 20 o 30 años.