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Pasadas las 10:30 de este jueves, se reinstaló la décima octava sesión ordinaria de la Cámara de Diputados, en la que se tenía previsto tratar el proyecto de Ley del Presupuesto General del Estado (PGE) Gestión 2023. Tras un cuarto intermedio de casi media ahora, se procedió a la aprobación en grande. 

Vía: Página Siete | 

Inmediatamente, esto generó reclamos por parte de la oposición, quienes calificaron esta maniobra de “inconstitucional”.

El diputado del MAS Omar Yujra fue el primer legislador en tomar la palabra y aprovechó el momento para enumerar el contenido del PGE 2023.

“En mi condición de presidente de la Comisión de Planificación, quiero hacer constancia la importancia del PGE, ya que en la anterior sesión se explicó el proyecto de ley y su contenido (...)”, dijo Yujra, que fue criticado por sus colegas de oposición, mientras hablaba y daba los datos económicos que se proyectaron en el PGE 2023.

El diputado de Comunidad Ciudadana Pablo Arízaga, por su parte, solicitó la moción de reconsideración y dijo que ésta sea votada uninominalmente por los legisladores de la Cámara de Diputados, como lo había hecho anteriormente su colega Carlos Alarcón.

Esta moción, sin embargo, no fue considerada ni votada, ya que la diputada del MAS Bertha Acarapi tomó inmediatamente la palabra.

La asambleista solicitó una serie de proyectos como el Campo Ferial, la construcción de una planta industrializadora de papa, industrializadora de aceite, además ítems para el sector de salud y de educación, entre otros. Argumentó que así como el PGE considera proyectos para otras regiones, de igual forma se debe incluir para la ciudad de El Alto.

Tras la comparecencia de los primeros legisladores, el diputado del MAS Juan José Jaúregu dijo que por la importancia del proyecto tratado, se debe determinar un cuarto intermedio en la sesión para lograr un consenso.

“Por la importancia del momento y responsabilidad del pueblo boliviano, le solicito señor presidente que pueda activar sus atribuciones, conforme a lo que señala el reglamento, donde le faculta a usted para que pueda determinar un cuarto intermedio y podamos avanzar en los correspondientes consensos y podamos garantizar y proseguir de manera armoniosa con el trámite legislativo que aún falta por concluir”, señaló Jáuregui.

Esta solicitud fue aceptada por Mercado, quien declaró un cuarto intermedio de 15 minutos en la sesión del pleno de la Cámara de Diputados, misma que se determinó cuando ni siquiera habían transcurrido 40 minutos de reinstalarse la misma.

Tras un transcurso de casi media hora, la sesión volvió a reinstalarse.

El 8 de diciembre, 68 legisladores, entre evistas y opositores, rechazaron el PGE en Diputados, en su estación en grande, y sólo 44 votaron a favor. La sesión entró en pausa y debía reanudarse el mismo día, sin embargo, fue suspendida hasta el martes, jornada en la que también fue postergada hasta hoy.

Luego de idas y vueltas, el martes hubo una reunión clave en el bando del partido azul, en la que participaron incluso autoridades del Ejecutivo. Tras la cita, los evistas apuntaron a la aprobación del PGE.

El MAS tiene 75 diputados en la Cámara Baja y para pasar la norma debe conseguir dos tercios de los votos, lo que supone 86 legisladores.