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Por: Zulema Alanes B. |
Diez años después, la represión Chaparina no se olvida. Los pueblos indígenas del Oriente, la Amazonía, la Chiquitania y el Chaco marchan una vez más reclamando las conquistas que lograron en su lucha por el territorio y la dignidad y reivindican su derecho a la autodeterminación dotándose de su propio Parlamento.
“Los roles y competencias del parlamento están dados, de manera progresiva sus funciones se van configurando, sesionamos en el trayecto de la marcha”, dijo Marcial Fabricano, vocero de la Marcha Indígena.
El líder indígena, que fue parte de la dirigencia que en 1990 encabezó la primera Marcha Indígena, explicó a Cabildeo Digital que “nuestro parlamento se va constituyendo conforme avanza la marcha, deliberamos, debatimos, ajustamos la estructura y dejó en claro que “ese es nuestro instrumento para delinear las acciones para restablecer nuestros derechos”.
LAS CONQUISTAS DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS
En el manifiesto por la “Identidad, unidad y dignidad para defender las tierras y los bosques del avasallamiento colonizador” Marcha Indígena por el Territorio y la Dignidad “obtuvo el reconocimiento estatal de la existencia de los pueblos indígenas y supo exigir el reconocimiento del derecho propietario sobre nuestros territorios ancestrales, plasmados tanto en decretos supremos y luego en la propia Constitución Política del Estado”, puntualizó Fabricano.
Recordó que el DS 22611 remarca la protección e integración de las poblaciones indígenas y reconoce el derecho de propiedad, colectiva e individual, a favor de los miembros de las poblaciones en cuestión sobre las tierras y el territorio.
“A tiempo de reconocer los derechos indígenas sobre nuestros territorios, establece el compromiso de restituir las áreas entregadas a las empresas”, subrayó Fabricano y reclamó porque “esas conquistas han sido afectadas, se han dado retrocesos que hoy reclamamos y pedimos se restituya todo lo alcanzado en largas jornadas de lucha”.
Aseguró que a 31 años de la primera gesta indígena “lo que reclamamos es que se cumpla lo que ya conquistamos, nuestras reivindicaciones ya fueron atendidas por el Estado, corresponde que se ratifiquen y que se cumplan”.
TRES DÉCADAS DE RECLAMOS
Entre agosto y septiembre de 1990, cansados del despojo e invasión permanente de ganaderos y madereros los pueblos indígenas de tierras bajas iniciaron la primera “Marcha por el Territorio y la Dignidad” desde San Lorenzo de Mojos y recorrieron más de 600 kilómetros en 34 días hasta la ciudad de La Paz, sede de gobierno.
Fue el inicio de tres décadas de protestas. Desde la primera incursión desde sus territorios hasta el centro del poder suman ya 11 marchas, incluida la que se inició el pasado 25 de agosto desde Trinidad hacia Santa Cruz.
“Hace 30 años nuestros territorios fueron ocupados por madereros, ganaderos, y traficantes de nuestra fauna, hoy los avasallamientos son de los agroindustriales y los colonizadores, estamos amenazados por la expansión de la frontera agrícola que el gobierno también promueve”, dijo Marcial Fabricano.
Reconoció que han sido años de intensa lucha y destacó la “Gran marcha indígena por la defensa del TIPNIS y la dignidad de los pueblos indígenas de la Amazonía, Chaco y Oriente” que también inició un 15 de agosto pero tuvo que sortear muchos desafíos como el bloqueo de interculturales y la represión desproporcionada del gobierno.
“Chaparina no se olvida”, dijo. La VIII Marcha Indígena por la defensa del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure, TIPNIS constituye uno de los acontecimientos más importantes del 2011 porque marca una nueva dinámica en la relación gobierno - pueblos indígenas por la violenta represión de Chaparina, ordenada por el gobierno de Evo Morales.
La marcha rechazó la construcción del “tramo II” de la carretera entre Villa Tunari y San Ignacio de Moxos que pretendía atravesar el corazón del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro-Sécure (TIPNIS), y cuestionó al gobierno por la ejecución de ese proyecto sin cumplir con el requisito de la Consulta Previa.
La VIII Marcha Indígena afrontó momentos críticos, como los bloqueos de San Ignacio de Mojos y Yucumo, pero el hito de mayor trascendencia fue la brutal intervención policial del 25 de septiembre en Chaparina. Este evento marcó un antes y un después en esta histórica movilización indígena y por la crueldad desplegada contra los marchistas, quedó marcada en la memoria colectiva de los movimientos sociales, como un referente repudiable del gobierno de Evo Morales.
LAS DEMANDAS INDÍGENAS
La XI Marcha Indígena por la “Identidad, Dignidad y Unidad para defender las tierras y los bosques del avasallamiento colonizador” inició el 26 de agosto y tiene planificado llegar a Santa Cruz el 25 de septiembre, cuando se cumplen 10 años de la violenta represión de Chaparina, sin sanciones para los responsables.
El manifiesto de la marcha es claro y demanda que “cesen los incendios forestales para convertir áreas de bosques a otros usos, principalmente ganaderos y agroindustriales”, también exige la derogación de “las leyes incendiarias, incendios provocados”.
Demandan también que “Dejen de invadir y financiar avasallamientos a nuestros territorios, respeten los bosques y hagan uso de los suelos según su capacidad”.
Y anuncian que “Como naciones indígenas tenemos derecho al desarrollo pero con identidad propia y eso es lo que legislaremos en el Parlamento de Naciones Indígenas de tierras bajas para nuestra libre determinación, la autonomía indígena, con gobierno propio, hacia la gestión sostenible de los territorios y la jurisdicción indígena”.
A su paso intentaron bloquear la marcha en la comunidad 16 de Julio, cuando los originarios cumplían el día 12 de caravana, ante los reclamos, el viceministro de Autonomías, Álvaro Ruíz, dijo que el gobierno no conoce el pliego petitorio ni a los dirigentes que encabezan la protesta.
“Existen demandas que no son atendidas, no es el caso de esta marcha, en las últimas semanas nos hemos reunido con los dirigentes de las organizaciones que aglomeran a los pueblos indígenas, pero ahora no conocemos el pliego petitorio, nos gustaría conocer su demanda para analizarla y evaluarla”, dijo.
El líder indígena y vocero de la marcha, Marcial Fabricano, le respondió que “no creo que no se entienda queremos nuestro territorio consolidado, es decir para que podamos desenvolvernos de manera autónoma, que nadie nos imponga requisitos, la Constitución lo reconoce, pero no queremos en el papel, queremos vivirlo y desarrollarlo, consolidar estos derechos reconocidos por el Estado, son 31 años que lo llevamos cargando y no vemos señales, estamos habitando nuestro territorios pero por encima las instancias del Estado nos invaden y avasallan”.
La XI Marcha Indígena, espera llegar a Santa Cruz el 25 de septiembre, la misma fecha que, 10 años antes, el gobierno del Estado Plurinacional reprimió violentamente a los indígenas de tierras bajas en Chaparina.
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