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El martes pasado, poco antes del trágico derrumbe en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza, en esa terminal aérea se concretó el multimillonario secuestro de un cargamento de cocaína y la detención de 13 personas vinculadas con la maniobra para tratar de trasladar la droga hacia España.
"¡240 kilos de cocaína! Iban de Ezeiza a Madrid en valijas. Los incautamos en un megaoperativo conjunto de la Policía de Seguridad Portuaria (PSA) y de la Aduana: 26 allanamientos, 13 detenidos. Un golpe de más de 140 millones de pesos. ¡Cada día mejoramos la lucha contra el narcotráfico!", celebró la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich.
Por su parte, el director nacional de la PSA, Alejandro Itzcovich, agregó que se trata de "decomiso más importante en la historia de la PSA, en cocaína y en un aeropuerto".
El operativo se realizó en el marco de una investigación que inició en abril la PSA, que incluyó escuchas telefónicas y que quedó en manos del juzgado Penal Económico número 2, a cargo de Pablo Yadarola.
El acceso a las comunicaciones telefónicas permitió anticipar la operación de un grupo de mulas, tal como se conoce en la jerga a las personas abocadas a burlar los controles para transportar droga de un lugar a otro. El objetivo era mover el cargamento desde Ezeiza hasta Madrid.
Y cuando las personas identificadas como mulas llegaron al aeropuerto para abordar un vuelo de Air Europa fueron apresadas con la cocaína en su poder. La captura se concreto a las 11, unas horas antes del colapso de los andamios que se instalaron para la construcción de la nueva terminal y que provocó la muerte de uno de los trabajadores y que otros 13 sufran heridas.
Según detallaron a Clarín, las mulas tenían previsto abordar el vuelo UX 042 de Air Europa, con escala en Madrid y con destino final a Barcelona. Además, a las personas detenidas se les secuestraron 9.201 dólares y 92.055 pesos.
Las 10 personas detenidas tenían un total de 258 kilos de cocaína distribuidos en panes que se guardaron dentro 9 valijas y cinco mochilas. El procedimiento lo llevó adelante personal de la PSA y de la Aduana y se basó en "la detección de perfiles de riesgo".
En las valijas también se observó la presencia de granos de café, que según indicaron los especialistas son utilizados con frecuencia por los narcotraficantes para intentar sortear los controles antidrogas que se realizan con perros entrenados para identificar olores.
A partir de allí se realizó una serie de allanamientos que permitieron dar con otras tres personas que estarían vinculada con la maniobra para tratar de trasladar la cocaína. Según la información preliminar, entre todos los detenidos hay al menos cuatro mujeres de entre 18 y 21 años, y dos hombres de 25. La mayoría es de Buenos Aires.
El titular de la PSA remarcó que se trata de una "banda internacional de narcotraficantes" y que reclutó a los detenidos por ser "gente muy joven" que "no tenía antecedentes" criminales. "No tenemos antecedentes en los países receptores de que haya salido tanta cocaína de la Argentina, por lo menos por vía aérea", agregó.
Itzcovich describió que la maniobra llamó la atención por la "burda" manera con la que se trató de pasar la droga. "Incluso nos sorprendió porque la Argentina ya no figura como un país exportador de cocaína por vía aérea y esto nos llamó la atención", amplió.
Sin embargo, consideró que se trataría de una "organización sofisticada" porque, explicó, el volumen de droga da cuenta de que detrás de la maniobra hubo "una inversión enorme".
Fuentes con acceso al caso indicaron que la investigación se centrará en determinar si existió alguna conexión entre la banda y el personal de seguridad del aeropuerto. "Nadie despacha esa cantidad de valijas con droga y sin disimular, sin tener garantizado que va a poder eludir los controles", dijeron.
Las sospechas apuntan a los sistemas locales porque los controles aeroportuarios se realizan en la terminal de origen. Es decir, que las maletas se inspeccionan al momento de partir.
//El Clarin//
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