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Mientras tanto, las tropas rusas intentan ganar terreno en Kharkiv y estudian trasladarse hacia el sur.
Vía: Infobae |
Ucrania ya ha logrado liberar 13 localidades en Lugansk en los últimos días. Sin embargo, las tropas rusas mantienen su ofensiva y buscan avanzar en el suroeste sobre la estratégica ciudad de Bahamut, epicentro de una feroz batalla en la región oriental de Donetsk, e intentan -igualmente- afianzarse en la vecina Lugansk.
“La situación en el frente es difícil. A pesar de las pérdidas rusas extremadamente grandes, los ocupantes intentan avanzar en la región de Donetsk y afianzarse en la región de Lugansk, ganar terreno en la región de Kharkiv , están planeando algo en el sur”, comentó el presidente Volodimir Zelenski en su habitual mensaje diario.
Las tropas ucranianas, no obstante, se mantienen firmes en su defensa y no permitirán que el enemigo “logre sus propósitos”. Así, continúan su contraofensiva en la región de Lugansk, prácticamente controlada por Rusia.
“Actualmente 13 asentamientos en la región de Lugansk han sido liberados. Es necesario llevar a cabo labores de desminado para ofrecer servicios sociales de manera segura a los residentes y restablecer el funcionamiento de la infraestructura crítica”, comentó el primer vicejefe de la Administración Civil-Militar de la región, Oleksiy Smirnov.
En el último tiempo, Moscú ha intensificado sus ataques en la región de Bahamut y Avdeevka, a donde han apuntado el fuego de los tanques, la artillería y la aviación. A su vez, este miércoles el portavoz del Ministerio de Defensa de Rusia, general mayor Ígor Konashénkov, comentó haber tomado el control de tres nuevas localidades en Donetsk: Belohirivka, Pershne Travna y Andreevka -a diez kilómetros al sur de la estratégica ciudad de Bahamut-.
La toma de esta última ciudad abre el camino al enemigo hacia Slaviansk y Kramatorsk, los principales bastiones ucranianos en Donetsk.
A pesar de estos “avances marginales” que lograron los rusos, el Instituto de Estudios de la Guerra (ISW) estadounidense dudó que “hayan avanzado al ritmo que afirman”.
Es por ello que “es poco probable que las fuerzas rusas alrededor de Bahamut pongan rápidamente a la ciudad bajo la amenaza de un cerco inminente”.
A esta postura se sumó Zelensky quien, en un tono irónico, se refirió a las promesas del Kremlin de que “tomarían la región de Donetsk en primavera, verano y otoño, y el invierno ya empieza esta semana”.
Por otro lado, el jefe de gabinete de Ucrania, Andriy Yermak, denunció nuevamente la estrategia rusa, por la que el mercenario grupo Wagner envía al frente, sin armas ni equipamiento, a los presos rusos contratados para luchar.
“Los llevan a las posiciones sin armas como si fueran carne. Luego, les llevan las armas prácticamente antes de la orden de avanzar. Reciben un rifle pero sin chalecos antibalas ni cascos y comienzan a asaltar nuestras posiciones”, señaló.
Según continuó Yermak, Wagner envía al frente cientos de personas cada día con la esperanza de debilitar las defensas ucranianas mientras, a las espaldas de esta “carne de cañón”, se esconden los militares profesionales rusos.
Las graves bajas en ambos bandos
Las cifras de las pérdidas en ambos ejércitos son cada vez más altas y continuarán aumentando en tanto avancen las ofensivas. Zelensky estimó que Rusia “perderá cien mil soldados este año y sólo Dios sabe cuántos mercenarios”.
El bando ucraniano ya contabilizó más de 88.000 bajas de Moscú desde el inicio de la ofensiva mientras que Rusia solamente dio cuenta de 6.000 y apuntó contra Ucrania, a quien señaló de tener más de 61.000 muertes.
Este tema, que es especialmente eludido por ambas partes, desató una polémica este miércoles cuando la presidente de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, publicó en Twitter un video en el que mencionaba 100.000 pérdidas en las filas ucranianas. La publicación fue rápidamente editada para eliminar el dato.
Por su parte, el jefe de prensa del Estado Mayor ucraniano, Bogdan Senik, se negó a confirmar la cifra y, en cambio, subrayó que se trata de una “información reservada y sujeta a limitaciones de difusión”.
“Sin embargo, si lo que dijo la presidenta de la Comisión Europea sirve para condenar al país agresor, solo podemos apoyar las acciones que propiciarán el castigo legal de quienes llevan a cabo el genocidio del pueblo ucraniano”, concluyó.
(Con información de EFE)
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