El obispo nicaragüense Rolando Álvarez, un férreo crítico del gobierno de Daniel Ortega, inició el viernes un ayuno indefinido en una iglesia de Managua en protesta por la “persecución policial” que ha venido sufriendo, según denunció públicamente.
Vía: LA Times |
Mediante un video que fue publicado en la página de Facebook de la diócesis de Matagalpa en el norte del país, la cual administra, monseñor Álvarez dijo que agentes de la Policía Nacional lo siguieron durante todo el jueves e incluso violentaron su “círculo de privacidad familiar” mientras visitaba a una sobrina.
“Hoy he sido perseguido durante todo el día por la policía sandinista, desde la mañana hasta estas horas de la noche, en todo momento, durante todos mis movimientos del día”, denunció el prelado, que también administra la diócesis de la norteña provincia de Estelí.
Monseñor Álvarez dijo que encaró a los oficiales y que éstos admitieron que lo seguían porque “obedecen órdenes”. Agregó que, lejos de suspender el acoso, por la noche los agentes “entraron en mi círculo de privacidad… poniendo en riesgo la seguridad de mi familia”, tras lo cual decidió refugiarse en una parroquia del sureste de la capital, donde inició el ayuno.
“Comienzo un ayuno a agua y suero, indefinido, hasta que la Policía Nacional a través del presidente o el vicepresidente de la Conferencia Episcopal me hagan saber que van a respetar mi círculo de privacidad familiar”, afirmó el obispo. “La inseguridad de este país es precisamente la policía, los que nos hacen sentir inseguros con esa persecución”, añadió.
El sacerdote se encuentra en la parroquia del Santo Cristo de Esquipulas, ubicada en el barrio residencial de Las Colinas, acompañado del vicario de la Arquidiócesis de Managua, monseñor Carlos Avilés, según indicó en el mismo video.
La sede religiosa se mantiene rodeada por varias patrullas de la policía y efectivos uniformados que fueron movilizados al lugar desde la mañana del viernes, informaron medios de prensa digitales en Managua.