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El exdirector del Fondo Indígena de Bolivia, Marco Aramayo, falleció, informó su esposa. Aramayo, enfrentaba un “cuadro muy delicado” y se encontraba internado desde el pasado sábado en el Hospital Municipal Cotahuma de La Paz, donde se confirmó que sufría una falla multiorgánica.
Marco Aramayo, otra víctima del sistema judicial boliviano.
«El masismo encabezado por Evo Morales lo torturó durante siete años en la cárcel hasta matarlo con 256 juicios, con golpes físicos, viajes inhumanos, humillaciones», se lee en la publicación del periodista Gómez
Aramayo denunció, en 2015, durante el gobierno de Evo Morales, un desfalco millonario en el Fondo Indígena (Fondioc) y desde entonces estaba con prisión preventiva en el penal de San Pedro y con una suma de juicios, pese a ser quien denunció la mega corrupción en dicho Fondo, que tenía como cabeza principal a la entonces ministra Nemesia Achacollo.
Achacollo autorizó el desembolso de 575 millones de bolivianos, en pleno año electoral, pese a la deuda y a la quiebra técnica del Fondo Indígena. Sin embargo, Aramayo terminó siendo el «chivo expiatorio» de éste escándalo, en tanto que el resto de dirigentes afines al MAS, incluida la exministra, gozan de libertad y el Estado no logró recuperar ni un centavo de los millones otorgados a dicha entidad.
El alcalde de La Paz, Iván Arias, recordó que, durante todo este tiempo de detención, Aramayo “ha registrado en su diario su encierro en 56 cárceles, las innumerables veces que fue cautelado, las incontables que no fue notificado, los nombres de jueces, fiscales y abogados que –dice– son sus ‘verdugos’, por no declararse culpable”.
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