Este lunes, 23 personas murieron y otras 13 resultaron heridas cuando un bus que se dirigía de la localidad cochabambina de Morochata hacia Quillacollo se embarrancó aproximadamente 200 metros. El coronel Armando Asturizaga, comandante del Valle Bajo, informó anoche que entre los fallecidos, existen cuatro menores de edad, pero en las listas entregadas a los medios, se registra el fallecimiento de tres niños.
El accidente se produjo, según reportes de medios locales, en una curva cerrada en la que conductor del bus habría realizado una brusca maniobra para no colisionar contra un vehículo que venía en sentido contrario. Algunos de los heridos fueron trasladados a un hospital de Quillacollo y cuatro de ellos fueron ingresados a la clínica Bustamante de la ciudad de Cochabamba.