Una multitudinaria marcha de simpatizantes del MAS descendió de la ciudad de El Alto y ya ingresó a La Paz, donde aviones de la Fuerza Aérea Boliviana realizan sobrevuelos, como parte de las tareas de seguridad conjuntas entre militares y la Policía Boliviana.
Nuevamente fueron acordonados los ingresos a plaza Murillo y se aguarda para esta tarde la instalación de la sesión del Senado que dé lugar al encuentro de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), donde debería aceptarse la dimisión de Evo Morales.
Inmediatamente llegaron efectivos de las Fuerzas Armadas (FFAA), que se apostaron en los ingresos al kilómetro cero de la sede de Gobierno, para evitar que existan desmanes, debido a que se presume que intentarían ingresar y tomar la Asamblea.
Los militantes del mandatario renunciante protagonizaron un improvisado cabildo, en el que rechazaron las ofensas a la wiphala, exigieron la renuncia de la alcaldesa Soledad Chapetón y exigieron que Luis Fernando Camacho ni Carlos Mesa sean candidatos en nuevas elecciones.
Las barricadas que dan acceso al centro del poder político permanecen y esta mañana existió un intento infructuoso de instalar la sesión en Diputados, donde apenas un puñado de legisladores llegaron, haciendo inviable su reorganización.
Ya ayer existía temor sobre la movilización de diferentes sectores que esperaban llegar a plaza Murillo e incluso se advirtió que pretenderían tomar el comando de la Policía, aspecto que luego fue descartado.
//El Deber//
//Foto Página Siete//
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