La intermediación es uno de los grandes problemas que afronta la producción campesina y de pequeños productores de alimentos. La solución no sólo pasa por mejorar los caminos que conectan las áreas rurales con las ciudades sino también por voluntad política.
“Es un gran problema y mientras no existan vías de acceso a los centros urbanos (desde las áreas de producción campesina), el tema no está resuelto y eso hace que la intermediación sea la que maneje el ritmo del abastecimiento en el país, en general, y sobre todo en la ciudad de La Paz”.
“No se han generado condiciones favorables para que estos sistemas alimentarios sean favorables. El sector productivo que está compuesto por familias y pequeños productores, no encuentra vías para comercializar sus productos con lo cual están siendo víctimas de la intermediación, porque para el productor abarata mucho las condiciones de producción poniendo en serias dificultades económicas a la producción y ahí es donde comienzan a quebrarse”, alertó.
La intermediación es uno de los grandes problemas que tiene la producción además de falta de apoyo a sus labores.
“Al no ver frutos de su trabajo que se refleje en el mejoramiento de su economía” la situación de este sector y del sistema alimentario es “tremendamente complicado”, dijo Torrejón.
NECESIDADES
Para el Coordinador del Proyecto DAC de UNITAS, los productores campesinos de alimentos requieren con urgencia centros de comercialización directa de sus productos, es decir, del productor al consumidor.
“Hace falta mercados o lugares de expendio donde puedan llegar los campesinos para comercializar sus productos; al margen del mercado campesino Zenobio Lopez en La Paz pero que funciona de vez en cuando y la Alcaldía hace esfuerzos para hacer alguna feria; no hay espacios regulares donde se pueda hacer la comercialización”, manifestó Torrejón.
EXPERIENCIA
En la gestión 2020, con la aparición de la pandemia en el país, las pequeñas unidades campesinas fueron las que resolvieron el tema alimentario en las cuarentenas rígidas.
“Se generaron facilidades de abastecimiento y el sector campesino hizo un tremendo esfuerzo para la instalación de ferias móviles donde productores campesinos comercializaban sus productos, aliviando los riesgos de contagio para la población”, recordó.
Esta experiencia reveló lo “la gran importancia del productor campesino para el abastecimiento de alimentos, pero también mostró la poca atención que recibe porque es un sector que no tuvo ningún tipo de apoyo del Gobierno y reconocimiento, y menos de los medios de comunicación porque hablaron de este tema que fue un factor clave para contener el gran miedo de los ciudadanos” a la falta de alimentos naturales y nutritivos.
Una experiencia positiva frente a la oferta de los supermercados, “donde se encontraba alimentos ultraprocesados contrarios a la salud y el medio ambiente”, dijo.
ACCIONES DE UNITAS
Según evaluación del Coordinador del Proyecto DAC de UNITAS, Enrique Torrejón, a través de esta institución se ha propuesto un proceso interesante para posicionar un enfoque sistémico alimentario. Es “ver la alimentación desde otra óptica, intentar que la población se haga corresponsable de su alimentación, intentar que lo cultural no sólo radica en una mirada meramente folclórica de las cosas, sino que trasciende el folklore. Que la alimentación está implicada en todas las actividades que realizan las personas y que pese a eso no está en las agendas de las instituciones como una prioridad”.
Se trata de un trabajo de sensibilización e incidencia pública para logar que la ciudadanía se dé cuenta que el tema alimentario es “tremendamente importante para la vida en general” frente a la imposibilidad de decidir qué comemos, en muchos casos.
“Hay una suerte de imposición de este sistema consumista en el que vivimos, el cual es ejercido desde los medios de comunicación con el bombardeo de publicidad de comida ultra procesada, poco saludable, que afecta a la economía del sector campesino”, consideró finalmente Torrejón.
UNITAS, junto a otras instituciones como IICA, INDICAP, ACLO Potosí y Chuquisaca, han impulsado el proyecto “Entre Verduras y comedores” para sensibilizar a la ciudadanía en esta problemática. El proyecto contó con el apoyo financiero de la Embajada de Suiza y Solidar Suiza.