Juan Manuel Corchado, consultor contratado por la Fiscalía General de Bolivia, señaló que la interrupción de la Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP), la noche del 20 de octubre del 2019, fue un “error imperdonable”.
La suspensión del TREP ordenada por vocales del Tribunal Supremo Electoral es un elemento central que sostiene la verificación del fraude en las elecciones de ese año.
El español afirmó que el trabajo realizado para la Fiscalía General del Estado no fue para definir si hubo o no fraude electoral el 2019, porque eso lo dirán la Fiscalía o los jueces.
Corchado aseguró que realizaron un examen completamente independiente, sin intervención de ninguna institución boliviana ni internacional y que fruto de ese análisis honesto, técnico, científico y pericial, se puede decir que se produjeron muchas infracciones y que el proceso electoral tuvo muchos defectos técnicos que no se deberían haber permitido.