Vía: BBC | France24
El presidente de Haití, Jovenel Moïse, murió este miércoles de madrugada en un ataque armado contra su residencia privada, según confirmó el primer ministro interino Claude Joseph en un comunicado.
En el asalto también resultó herida la primera dama, Martine Moïse, quien ha sido hospitalizada.
Los hechos se produjeron alrededor de la 1:00 am hora local, cuando un grupo de individuos no identificados tiroteó el domicilio del presidente en Puerto Príncipe, la capital haitiana.
Joseph declaró que se "han tomado todas las medidas para garantizar la continuidad del Estado".
Desde primera hora de la mañana, diversos líderes políticos mundiales han lanzado a través de las redes sociales mensajes de condolencias y la condena por el asesinato del presidente haitiano. La Casa Blanca dijo que informará al presidente estadounidense, Joe Biden, sobre el "trágico ataque" contra Moïse y su esposa, añadiendo que Estados Unidos "ayudará de cualquier forma".
"Es un crimen horrible y lamentamos mucho la pérdida", dijo en una entrevista con CNN la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, sobre el asesinato del presidente haitiano. "Estamos preparados y apoyados para brindarles la asistencia que se necesite", reiteró Psaki.
La embajada estadounidense en Haití anunció en un comunicado que estaría cerrada a partir de este miércoles 7 de julio debido a la "situación de seguridad en curso".
Por su parte, el primer ministro británico Boris Johnson denominó el magnicidio como "un acto abominable" y llamó a la calma en el país caribeño. "Estoy conmocionado y triste por la muerte del presidente Moise", declaró el británico.
Por su parte, la vecina República Dominicana informó del cierre de su frontera terrestre con Haití, de unos 380 kilómetros de extensión. El presidente dominicano, Luis Abinader, ordenó el cierre de los cuatro pasos fronterizos con Haití y dispuso el refuerzo de la vigilancia en la zona, según dijo un responsable del Cuerpo Especializado en Seguridad Fronteriza Terrestre (Cesfront).
Según medios locales, el aeropuerto internacional de Puerto Príncipe, también está cerrado debido al asesinato del mandatario.
Crisis política, social, económica y una fuerte inseguridad
El inestable país caribeño –de 11 millones de habitantes– está muy dividido políticamente y enfrenta una fuerte crisis humanitaria, con escasez de alimentos, falta de oportunidades laborales y el agravamiento de la crisis económica debido a la pandemia de Covid-19, que ha estado desatendida por las autoridades. Haití es uno de los pocos países del mundo que todavía no han recibido ni una sola dosis del suero contra el patógeno.
En paralelo, Haití está también sumido en una honda crisis de seguridad, más de 150 personas fueron asesinadas y otras 200 secuestradas entre el 1 y el 30 de junio pasado en la zona metropolitana de Puerto Príncipe, según reveló este martes un informe del Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos (CARDH).
Nuevas elecciones presidenciales en septiembre
En los últimos meses, los líderes opositores han exigido su dimisión, argumentando que su mandato culminaba legalmente en febrero de 2021 –cinco años después de las caóticas elecciones de 2016– y no en 2022, como defendían Moïse y sus partidarios.
En este contexto, debido a una creciente inconformidad de la ciudadanía contra su Gobierno y después de dos aplazamientos, el presidente convocó nuevas elecciones presidenciales, legislativas y un polémico referendo para modificar la Constitución, que se celebrarían el próximo 26 de septiembre. Está por ver qué sucede tras el magnicidio que ha conmocionado a los haitianos y que podría agravar la inestable situación del país.