Vía: Brújula Digital |
En una inédita conferencia de prensa, embajadores de la Unión Europea (UE), Alemania, Suecia, Francia y el encargado de negocios de España denunciaron que Rusia al invadir a Ucrania declaró la guerra al sistema democrático y los derechos humanos.
El embajador de la UE, Michael Dóczy, lamentó que "la guerra ha vuelto al continente europeo". "Un país ataca a otro sin ningún motivo con el objetivo de derrocar a su presidente elegido democráticamente y destrozar al país".
Describió los graves cuadros que reflejan la invasión rusa como muertos calcinados en las calles, bombas que son apuntadas a la población civil, niños que nacen en refugios antibombas, decenas de personas que huyen de las zonas de conflicto y según las Naciones Unidas hay al menos 227 civiles muertos, entre ellos 15 niños, aunque el diplomático expresó que las cifras pueden ser superiores.
Al menos 2 millones de personas huyeron del país ante la grave situación, un millón de personas se fueron a países vecinos y hay campañas masivas de desinformación por lo que estableció algunos "hechos" para separar de las "mentiras".
"Una de las principales potencias nucleares ha atacado e invadido un país vecino, pacífico y democrático (...) Esta es la violación más grave del derecho internacional y los principios fundamentales en los que se basa la convivencia internacional", lamentó en rueda de prensa en La Paz.
También dijo que esta agresión amenaza no sólo la seguridad del continente europeo sino a toda la comunidad internacional.
Recordó que ayer la Asamblea de la ONU aprobó una resolución de "rotunda condena" a los ataques rusos con el voto de 141 países y cinco en contra
Dóczy evitó referirse a la abstención de Bolivia y recordó lo expresado por la presidencia de la UE. "Este es un choque entre el estado de derecho y el estado de las armas y las democracias y las autocracias".
En la ronda de preguntas dijo que sostendran reuniones con la Cancillería boliviana para explicar el conflicto entre ambos países.
"Como europeo nunca me sentí conmocionado por lo que está sucediendo" indicó.
La embajadora de Francia, Hélène Roos, destacó las gestiones realizadas por el presidente de su país Emmanuel Macron entre Moscú y Kiev antes de la invasión y continúan ahora.
"Todos nuestros esfuerzos están abiertos a mantener los canales de comunicación abiertos" enfatizó.
Después aclaró que "no estamos en guerra con Rusia, estamos apoyando a Ucrania para defenderse, defender sus derechos y defender su libertad".
El embajador de Alemania, Stefan Duppel, afirmó que la situación de Ucrania "no es una situación de este y oeste o norte y sur" por lo que demandó el cese de toda acción militar, el restablecimiento de la integridad territorial y la soberanía de Ucrania.
"El gobierno de Rusia afirma cínicamente que la invasión es para su protección, ya sabemos que sólo vivimos el principio, Ucrania nos concierne a todos", reflexionó.
El embajador de Suecia, Nicolas Weeks, expresó que "la invasión de Rusia a Ucrania es un acto imperialista que intenta subvertir al gobierno de un país soberano" y que el pueblo ucraniano tiene derecho a la "autodeterminación" como otros países.
"Rusia es el agresor, no debería haber ninguna duda, este no es un conflicto entre Rusia y la OTAN. Rusia ha declarado la guerra a las libertades que todos defendemos. Mi país, Suecia, ni siquiera forma parte de la OTAN pero nosotros hemos recibido amenazas de consecuencias militares de parte de Rusia si nos atrevemos a ejercer nuestra soberanía", denunció.
El encargado de Negocios de España en Bolivia dijo que la invasión rusa a Ucrania no sólo es un problema que atañe a dos países, "nisiquiera es un conflicto entre bloques". "Es un acto de agresión a un conjunto de principios valores y principios en los que se sustentan el conjunto de la comunidad internacional (como) el respeto a la carta de las Naciones Unidas, la soberanía de los estados, la injerencia en asuntos de otro estado, el arreglo pacífico de controversias (...) todos esos principios fueron atacados", relevó.