Adepcoca liderada por Armin Lluta, abandonó la mesa de diálogo y el gobierno determinó terminada su medicación, dejando en las bases cocaleras la elección de una nueva directiva.
En medio del diálogo se propuso que un “ampliado de unidad”, de ambos bloques, defina donde iba a estar ubicada Digcoin, sin embargo, Lluta no aceptó esa alternativa y se mantuvo en el traslado a las oficinas desde Kalajahuira a Villa Fátima. Ese fue el punto de inflexión en un prolongado proceso de dialogo.
Elena Flores, presidenta del otro sector de Adepcoca, ratificó su legalidad y afirmó que continuarán en el proceso electoral desde mañana para elegir a la nueva directiva. Este planteamiento fue el principal durante los días que hubo el diálogo.