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Por: Zulema Alanes B. |
Foto: Página Siete |
Ninguna iniciativa para la pacificación del país tendrá eco “en un gobierno que no gobierna”, y en la actual coyuntura es previsible que se agudicen las condiciones para aumentar los niveles de violencia política en el país, aseguró a Cabildeo Digital el analista Armando De La Parra.
Este lunes, Comunidad Ciudadana (CC) presentó una propuesta de pacificación que fue de inmediato rechazada por voceros del Movimiento Al Socialismo (MAS) en el Legislativo, pero no generó ninguna reacción de parte del Ejecutivo. Este miércoles, Carlos Mesa envío su propuesta al presidente Luis Arce y la vicepresidente David Choquehuanca.
Según De La Parra, el silencio del Ejecutivo respecto a la iniciativa de pacificación del país presentada por CC se debe a que “ha llegado a un gobierno que no está gobernando y no tiene la capacidad de responder, por eso las respuestas vienen de diputados”.
El analista dijo que las señales no son muy auspiciosas y que “no se puede descargar el recrudecimiento de la violencia”, al contrario, “hay que estar alertas porque el gobierno sombra del Evo puede provocar el recrudecimiento de la violencia una vez que se conozcan los resultados finales de las subnacionales”.
Diálogo y acuerdo para pacificar el país
Carlos Mesa, presidente de Comunidad Ciudadana (CC), presentó las bases para un diálogo para la pacificación que incluye seis medidas para avanzar hacia un escenario de paz y reconciliación.
Aseguró que el país vive “un momento crítico para la democracia y la vigencia de los derechos humanos” e insistió que la paz y la reconciliación son imprescindibles “para resolver nuestros grandes problemas de empleo, economía, salud, educción y medio ambiente”.
La agenda de CC plantea el reconocimiento de las elecciones generales de 2020 para superar la polarización política entre los discursos de golpe /fraude; liberar a los presos políticos y suspender toda acción de confrontación, judicialización y persecución, así como restablecer la independencia, imparcialidad e idoneidad y renovar el Ministerio Público y el Órgano Judicial y; reponer los dos tercios en los reglamentos de ambas cámaras en el Legislativo.
Mesa anunció que en perspectiva de lograr un acuerdo nacional “participaremos y apoyaremos decididamente las iniciativas para encontrar las formas, mecanismos y procedimientos que lo concreten” y dejó en manos “del gobierno del MAS, del presidente, del vicepresidente, de su ministro de Justicia, la responsabilidad de comprender que este es un espacio planteado para cambiar nuestra actitud, la actitud de todos”.
Este miércoles el jefe de CC envío su propuesta al presidente Luis Arce y al vicepresidente David Choquehuanca las “Bases para la paz y la reconciliación” e insistió en “la necesidad de construir un escenario de diálogo, de paz y de consenso”.
El diputado de CC, Carlos Alarcón, informó que la propuesta está siendo socializada para “sensibilizar a los líderes de la sociedad, autoridades y organizaciones sociales respecto a la necesidad de terminar con la confrontación, la persecución y el enfrentamiento”.
Rechazo del MAS, silencio del gobierno
“Esperamos una respuesta del gobierno”, dijo Mesa, pero esa respuesta no llegó. La única reacción fue la del presidente de la Cámara de Diputados, Freddy Mamani, que rechazó la propuesta y la calificó de “totalmente demagógica”.
Cuestionó los argumentos de Comunidad Ciudadana y aseguró que no hay polarización, “¿Qué polarización? ¿Entre quienes? ¿Entre qué personas?”, cuestionó Mamani y dijo que lo único que ocurre en el país es el juzgamiento de “Quienes han cometido delitos y ahí está la justicia”.
El diputado del MAS, Héctor Arce, se sumó al rechazo, calificó la agenda de seis puntos de “un panfleto”, apuntó a Mesa como “defensor del golpe de Estado, de la impunidad y de la corrupción”, aseguró que CC fue parte del gobierno de transición en el que “se instauró un régimen de terror, brutal y sanguinario”.
Este martes, en una clara intención de restringir la presencia de Carlos Mesa en instalaciones del Legislativo, las directivas de ambas cámaras limitaron las conferencias de prensa al interior del Legislativo, “únicamente a autoridades electas de la Asamblea Legislativa Plurinacional. En caso de que los asambleístas tengan invitados ajenos a la institución, estos deberán contar con el respectivo permiso de ingreso, otorgado por autoridad competente".
Mesa incomoda al oficialismo, pero su propuesta ha logrado la adhesión de la Iglesia Católica y de varios líderes políticos. La Conferencia Episcopal de Bolivia ha anunciado su respaldo a “todo lo que sea mirar adelante, hacia el futuro”, el expresidente Eduardo Rodríguez Veltzé ha escrito en su cuenta de Twitter que “es tiempo para lograr acuerdo nacionales para la recuperación de la economía; la renovación de la justicia y con programas efectivos en salud y educación”. Al respaldo se han sumado Creemos y Demócratas.
¿Quién gobierna?
El diálogo y la pacificación del país no están en la agenda del Movimiento Al Socialismo, aseguró Armando De La Parra y dijo que para proyectar cualquier salida política a la actual coyuntura de crisis de la democracia, “lo primero que debemos tener claro es ¿Quién gobierna? ¿Gobierna Luis Arce y su gabinete o Evo Morales y su grupo?”.
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Y él mismo respondió: “El gabinete es fantasma, el propio Arce anda escondido, no tiene plan de gobierno, ni siquiera acciones para encarar las cuestiones de mayor urgencia”, y se mostró escéptico respecto a la posibilidad de un acercamiento entre oficialismo y oposición.
En su opinión, sólo después de la segunda vuelta para la definición de las gobernaciones, el próximo 7 de abril, habrá claridad sobre la correlación de fuerzas “en gran medida, el MAS ha perdido el control del eje central del país, y si pierde en el balotaje, deberá enfrentarse a su propia crisis interna y recomponerse. Solo un resultado adverso al MAS podría dar un respiro para pensar en una agenda de pacificación”.
Dijo que hasta ahora todo indica que “el MAS ha elegido el camino de la confrontación y la judicialización de la política, quiere meter más opositores a la cárcel, no tiene intención de resolver conflictos como el de los cocaleros de los Yungas”.
De La Parra, opinó que el MAS ha desplegado una especie de “cerco judicial” para neutralizar a la oposición. Este martes, se revocó la libertad irrestricta del líder de la Resistencia Juvenil Cochala, Yassir Molina, y se ordenó su detención preventiva por seis meses en el penal de Sucre. También se anunció nuevas acciones en contra de otras exautoridades: la exministra María Pinckert fue denunciada por la supuesta designación irregular de un funcionario y citada por la fiscalía; el Ministerio Público amplió la investigación contra cinco personas, entre ellas, Wilson Santamaría, exviceministro de Seguridad Ciudadana y Hernán Avelino Pereira Fernández, exdirector de la Agencia de Infraestructura en Salud y Equipamiento Médico (AISEM), dentro del caso de los 170 respiradores españoles. El alcalde electo de La Paz y exministro de la transición, Iván Arias, también enfrenta varios procesos en la justicia.
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