Por: Zulema Alanes |
El gobierno mostró tras las rejas a la expresidenta Jeanine Añez y a sus dos exministros y líderes políticos, cívicos y religiosos, representantes de la comunidad internacional, analistas y ciudadanía rechazaron de manera unánime la persecución política del gobierno. La represión no cesó, la noche de este sábado, la policía aprehendió a Yasir Molina, líder de la Resistencia Juvenil Cochala.
“Los cabecillas del grupo irregular denominado “resistencia” de Cochabamba que ejercieron violencia sin medida, sembrando terror, zozobra, miedo ante la población, también tienen que rendir cuentas ante la justicia”, amenazó el presidente del Senado, Andrónico Rodríguez, en su cuenta de Twitter.
Horas antes, Jeanine Añez, denunció el “plan del gobierno del MAS para instalar una dictadura en Bolivia” y pidió a la OEA y a la Unión Europea que envíen observadores.
Cerca de la media noche la Fiscalía formuló la imputación formal de la expresidenta Jeanine Áñez y de los exministros Álvaro Coímbra y Rodrigo Guzmán y solicitó su detención preventiva por seis meses en los centros penitenciarios de Obrajes y de San Pedro, respectivamente, de la ciudad de La Paz.
LIBEREN A LOS APREHENDIDOS
El gobierno desoyó el mensaje de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB) que pidió este sábado que libere a los aprehendidos y desista “de la revancha y la persecución” además de recordar que “La democracia exige respeto a los derechos humanos”.
El comunicado de la CEB que fue leído por el Arzobispo de Sucre, monseñor Ricardo Centellas, llamó “a reflexionar y ayudar a nuestro pueblo a mirar al futuro con esperanza en la consecución de un país de reconciliación y paz para todos los bolivianos” y pidió al gobierno “a desistir del control total del poder”.
El pronunciamiento eclesial se pronunció ante la aprehensión de la expresidenta Jeanine Añez y dos de sus exministros y observó que no se haya respetado las “garantías mínimas constitucionales ni siquiera la presunción de inocencia”, exigió el respeto al debido proceso y la inmediata libertad de los detenidos y cuestionó al sistema judicial “que deja impunes a unos y criminaliza a otros, dependiendo del Poder político en cada momento”.
El vicepresidente David Choquehuanca, salió al paso a través de su cuenta de Twitter para explicar que “No es el odio el que impulsa nuestros actos, sino una pasión por la justicia…”, pero recibió una andanada de críticas que cuestionaron su doble moral y le reclamaron por qué no empieza enjuiciando a quien violó la Constitución, se burló de la voluntad popular, e hizo fraude. El periodista Andrés Gómez le dijo que en tanto no lo haga “…usted no es más que el segundo del gobierno del odio”.
Todos apuntaron a Evo Morales como el responsable de la cacería política y un grupo de ciudadanos abucheó al jefe del MAS cuando abordaba un avión de BOA. “Fuera, maleante, pedófilo, ¿Quién se cansa? Nadie se cansa, ¿Quién se rinde? Nadie se rinde”, le gritaron. “Y como era previsible, huyó”, escribió Gómez.
El expresidente Jorge Tuto Quiroga llamó cobarde a Evo Morales y lo retó a un debate público para demostrar con testigos que Jeanine Añez asumió la presidencia por sucesión constitucional y no por un golpe de Estado. No se reservó críticas al actual presidente Luis Arce a quien calificó como un “aprendiz de tirano”.
En una exhortación directa al jefe del MAS, le dijo: “Evo, tú y yo sabemos todo lo que pasó, dime en qué canal, a qué hora quieres ir esta semana a discutir dos horas y ven con todos, con Adriana Salvatierra, con la señora (Susana) Rivero, que vengan todos y vamos a demostrar contigo que hubo sucesión constitucional, porque tu renunciaste y escapaste. Evo huiste como cobarde, exigías desde el Chapare reuniones para que se autorice tu fuga, se llene el vacío de poder y se proceda a la sucesión constitucional”, declaró durante una conferencia de prensa.
LA DEFENSA DE LA DEMOCRACIA
El líder de Comunidad Ciudadana (CC), Carlos Mesa, llamó a defender la democracia y alertó que el país se enfrenta a un momento extremadamente grave porque "El Gobierno camina hacia el modelo venezolano”.
Cuestionó las aprehensiones de Añez y sus ministros y advirtió que “mañana vendrán por nosotros, por ustedes, por la destrucción del sistema democrático” como parte de un plan “presidido por Luis Arce y conducido políticamente por Evo Morales (…) Marca la decisión del Gobierno Arce-Morales de llevar a Bolivia al modelo venezolano, de la autocracia, del fin del Estado de derecho".
Mesa dijo que es el momento de defender la democracia y denunció que los procesos anunciados contra la expresidenta Añez y sus colaboradores, pretende también legitimar el fraude en las elecciones subnacionales “donde el MAS sufrió un fuerte revés político”.
Descalificó los argumentos del gobierno respecto a un supuesto golpe de Estado y dijo quesi tuviera sustento correspondería detenerse a la presidenta del senado y al de diputados, a los parlamentarios del MAS, a la defensora del pueblo, al secretario ejecutivo de la Central Obrera Boliviana (COB) y al Tribunal Constitucional, que avaló la sucesión constitucional.
El ministro de Justicia, Iván Lima, aseguró que Áñez es procesada en calidad de exsenadora y no como expresidenta, por una demanda instaurada por la diputada del MAS, Lidia Patty, según la agencia oficial ABI.
“En este momento estamos ante un juicio a una exsenadora, por lo tanto, no corresponde un juicio de privilegio constitucional (…) estamos ante un juicio ordinario”, detalló Lima y negó las denuncias de persecución política.
Sin embargo el exlíder cívico y gobernador electo de Santa Cruz, Fernando Camacho se mostró sorprendido porque el gobierno ha instruido aprehender a personas que no son parte de la demanda y detalló que aparece como el principal implicado en la demanda de la diputada del MAS, Lidia Patty, aunque dijo que hasta el momento desconoce el proceso por los pleitos de sedición, terrorismo y conspiración.
Pidió a la población estar alerta y anunció que se coordina con políticos, cívicos y plataformas a nivel nacional para asumir acciones e informó que "Empezamos a coordinar a nivel nacional para rearticular el movimiento nacional de esa oposición limpia y transparente que fue parte de lo que significa una lucha pacífica contra el fraude”.
Camacho pidió al presidente Luis Arce que “deje de ser un títere de Evo Morales”, le recordó que Santa Cruz comenzó la lucha contra el fraude electoral y que se extendió a todo el país y le pidió que pare la persecución.
El Comité Cívico Pro Santa Cruz emitió una resolución y llamó a la resistencia civil y reafirmó que “no vamos a permitir que ningún cruceño ni boliviano sea perseguido por resistir y protestar pacíficamente los 21 días por el fraude electoral”.
Esta crisis apenas comienza y los ojos de la comunidad internacional ya están puestos en Bolivia.