Tras las amenazas de marchas de micro y pequeños productores de El Alto y de transportistas sindicalizados, el Gobierno incluyó este lunes la posibilidad de que el Sistema Financiero Nacional otorgue periodos de gracia para los créditos diferidos que accedan a refinanciamiento o reprogramación.
Esa decisión fue tomada durante una reunión que sostuvieron autoridades de ambas carteras de Estado y los titulares de la ASFI y de la Aduana Nacional; Reynaldo Yujra y Karina Serrudo, respectivamente, con dirigentes de la Confederación Nacional de Micro y Pequeños Empresarios (Conamype).
Este último sector, los últimos días del pasado año anunció una marcha para esta primera semana de 2021, reclamando al Gobierno la ampliación del diferimiento de créditos debido a su iliquidez para reasumir con la obligación.
De acuerdo a un boletín oficial, el Ministerio de Economía en coordinación con el Ministerio de Desarrollo Productivo y la Autoridad de Supervisión del Sistema Financiero (ASFI), estableció incorporar en la reglamentación del Decreto Supremo 4409 la posibilidad de que la banca privada otorgue periodos de gracia para aquellos créditos diferidos que lleven adelante los procesos de refinanciamiento o reprogramación.
La citada norma se promulgó el 2 de diciembre de 2020 con el objeto de establecer que las entidades de intermediación financiera realicen el refinanciamiento y/o reprogramación de las operaciones de crédito, cuyas cuotas fueron diferidas por la pandemia del COVID-19.
Conforme al boletín difundido, para cumplir con ese objetivo la ASFI debe emitir una resolución correspondiente hasta el martes.
En el citado encuentro, se socializó a los dirigentes de Conamype de todo el país las ventajas que representa la otorgación de periodos de gracia para la cartera diferida, medida adicional a las establecidas en el Decreto Supremo 4409.
Adicionalmente, en esta reunión se trataron también temas referidos a la reglamentación del Decreto Supremo 4424 que crea dos fideicomisos para la reactivación y desarrollo de la industria nacional; además del contrabando, principalmente de ropa usada, que afectó duramente a los pequeños y microempresarios, concluye el documento difundido.