Mediante comunicado público, el Ministerio de Gobierno señaló que el ministro de esa cartera, Arturo Murillo, se disculpó por acusar a una mujer de supuesto rapto de una recién nacida, en la zona de Villa Fátima.
La propia sindicada se presentó el jueves a la Policía para asegurar que es inocente, bajo el argumento de que tuvo que trasladarse desde Guanay. Ya tiene seis hijos y no le interesa hacerse de otra persona. La madre de la bebé desaparecida también negó la participación de esa sospechosa y dijo que no sabe de dónde el Gobierno consiguió esa información.
El comunicado explica que la fotografía de la persona sospechosa del rapto fue proporcionada por personas que identificaron a una mujer con las características señaladas en el identikit elaborado por la policía. El Ministerio de Gobierno pidió que las autoridades, población y medios de comunicación se enfoquen en el problema fundamental: la desaparición de la bebé.
Pacheco explicó que gente de la “Defensoría y la Guardia Municipal” fueron a buscarla a su casa, en el distrito yungueño de Guanay, capital de la provincia paceña de Larecaja, lo que dejó preocupados a sus familiares y amigos. Todo comenzó la mañana del jueves, cuando el Ministerio de Gobierno publicó la foto de la mujer que vive en los Yungas.
La señora contó que por la tarde, cuando se encontraba en La Paz, se presentó de forma voluntaria en oficinas de la Policía, para aclarar la situación. Se enteró que su foto estaba en las redes sociales porque le llamaron desde el pueblo donde vive.
La mujer explicó que llegó a La Paz para visitar a un familiar que está en terapia intensiva del Hospital Obrero, sin sospechar que sería acusada falsamente y tendría que verse en la necesidad de aclarar el error de las autoridades.