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Vía: ANF |
La supuesta asociación de ganaderos de Apolo, en la comunidad Copacabana, mantiene el avasallamiento y toma de 19 hectáreas de tierra pertenecientes a 7 familias, con el argumento de que eran predios abandonados.
Quintín García Larico, uno de los afectados y cuñado del apicultor Juan Bascopé Cari, denunció que los supuestos ganaderos ahora están explotando toda la madera del lugar en especies como Laurel, Cedrillo y Cedro para venderlo y siguen sembrando pasto para ganado.
“El lugar que trabajábamos nos están quitando todo, todo están tomándolo, incluso ya lo están sacando la madera, y no han paralizado el trabajo, siguen sembrando pasto, pese a que está una queja por resolverse en el Tribunal Agroambiental”, dijo García a ANF.
El avasallamiento ocurrió la noche del 5 de enero de este año, cuando García junto a su familia se encontraban en la población de Apolo. Tras ocurrido el hecho, él acudió a la Policía, a la Federación de Campesinos, a la organización de ganaderos, a la unidad Agroambiental, pero nadie le dio respuesta.
De acuerdo a la denuncia, los avasalladores quemaron casas, herramientas, troncos, material de cultivo y destruyeron sembradíos para habilitarlos como lugares de pastoreo.
Las familias afectadas responsabilizaron por estos hechos al presidente de los ganaderos y representante de la comunidad Copacabana, José Luis Baluarte, quien junto a Ramiro Cito, Felipe Cito (padre de Ramiro), Raúl Baluarte, Juan Baluarte y Percy Fernández, comunarios ingresaron a los predios a quemar y causar destrozos.
Juan Bascopé Cari, familiar de los afectados, señaló que esta acción y abuso se trata de una represalia en su contra por denunciar a las personas señaladas como parte de los hechos violentos ocurridos en 2013 en Apolo, donde fallecieron cuatro efectivos de erradicación de coca. “Mientras los responsables están libres, a mí me hacen pagar con una sentencia de 30 años”, dijo a ANF.
La casa y las colmenas de Bascopé fueron saqueadas y encontradas en otra comunidad. Él espera recuperar todas sus propiedades cuando salga libre.
García denunció que incluso los avasalladores al lado de su casa “pusieron una tranca cortando el paso a la comunidad de Chiara Araña, ni auto ni moto ni a las personas dejan pasar” esos ganaderos.
Los avasalladores, que hablan a nombre de la comunidad, usan como pretexto, para ingresar a los predios, que las personas no viven en el lugar y que abandonaron sus cultivos, sin que en ningún momento notifiquen a las familias con alguna resolución de expulsión o desvinculación de la comunidad.
Reiteró que la Policía por ningún motivo quiere investigar el hecho debido a que desde el avasallamiento minero que hubo en la población de Chiara Araña, en septiembre de 2023, pobladores con armas de fuego “desvistieron a los policías, les pegaron y hasta los gasificaron”.
Para el 25 de abril estaba programada una audiencia en el juzgado Agroambiental de Apolo, pero no se conoce información sobre si se llevó a cabo.
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