.jpg)
El rechazo a la reelección de Evo Morales, el respeto al 21F y a la Chiquitanía fueron las consignas que juraron cumplir las cientos de miles de personas que formaron parte del multitudinario cabildo realizado ayer en Santa Cruz.
En medio de gritos desafiantes, el público se comprometió al voto castigo a Morales y a declararse en rebeldía en caso de existir un fraude electoral que beneficie al binomio oficialista. El cabildo también marcó el punto de partido para convertir a Bolivia en una república federal.
“Hemos resuelto ir a las urnas y hacer respetar nuestro voto del 21F que nos arrebataron, ir a las urnas con la consigna del voto castigo a Evo Morales. En la papeleta hay hombres y mujeres que están habilitados legalmente en estas elecciones, escojamos entre los habilitados y castiguemos a nuestro dictador”, expresó el presidente del Comité Pro Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, mientras el público, con gritos de “Evo dictador”, respaldaba la propuesta del líder cívico.
El cabildo mostró una impresionante presencia opositora. La gente, desde primeras horas de la tarde, comenzó a reunirse a los pies del monumento El Cristo Redentor y, al promediar las 17:00, la multitud había copado más de 200 metros de cada una de las cuatro avenidas que cruzan la histórica rotonda, donde en 2004, 2005 y 2006 se llevaron a cabo sendos cabildos que dieron paso al surgimiento de las autonomías.
Tanto Camacho como la activista Alejandra Serrate plantearon la declaratoria de rebeldía y desobediencia a los resultados de las elecciones por la posibilidad de un fraude que beneficie a Morales. Serrate preguntó: “¿Juran por su patria y su fe, rebeldía y desconocimiento ante un posible fraudulento cuarto mandato del binomio dictatorial e ilegal?”. La ensordecedora respuesta fue: “Sí, juro”.
Camacho dijo que la rebeldía ante el posible fraude es un derecho y aclaró que no se trata de sedición, sino de soberanía y valentía.
La parte más esperada del cabildo fue el lanzamiento de las cuatro preguntas. La última, muy aclamada, guarda relación con el inicio de una república federal. “¿Están dispuestos a que este Cabildo sea el punto de partida, en donde asumamos el compromiso ciudadano e institucional de trabajar sin descanso en una propuesta federal real, solidaria, unificadora?”, preguntó Camacho. Los asistentes dijeron que sí y corearon: “Federalismo, federalismo, federalismo”.
La primera pregunta del cabildo, aprobada por los asistentes, fue la declaratoria ciudadana de desastre nacional para sumir el compromiso de gestionar ayuda internacional para apagar los incendios en la Chiquitanía.
La segunda pregunta, también aprobada, fue la otorgación de un plazo al Gobierno nacional para abrogar la Ley 741 y el Decreto Supremo 3973 que autorizan desmontes y quemas. El plazo es de cinco días calendario; caso contrario, se procederá a desconocer dichas normas en Santa Cruz.
La tercera pregunta fue: “¿Están dispuestos a impedir y desalojar las dotaciones y asentamientos humanos ilegales en tierras fiscales y áreas protegidas, ejecutado por el INRA, que no hayan cumplidos todos los requisitos establecidos por Ley?”. La respuesta fue afirmativa y se otorgó un plazo hasta el 7 de octubre y, en caso de incumplimiento, se ejecutará al mandato del cabildo.
1 millón de personas. Los organizadores calcularon que un millón de personas asistieron al Gran Cabildo de Santa Cruz.
//Los Tiempos//
%20(1)%20(1)%20(1)%20(1)%20(1)%20(1)%20(1)%20(1).jpg)
